sábado, 4 de enero de 2014

No desde siempre pero si para siempre.

Cuando estoy a su lado, en su cama, debajo de las sábanas, con mis pies fríos jugando con los suyos, sus manos rodeándome y sus besos , los más dulces que conozco aterrizando sobre mis labios, me siento segura, es como el café por las mañanas, que te hace llevar una mañana más ligera, o como el dulce olor a sal de la playa, ese olor que te provoca ternura, tranquilidad , es como encontrarse en un crudo invierno, frío , con la nieve cayéndote en la cabeza y sentir sus brazos agarrándote fuerte para que no tengas frío, como ponerte tu chaqueta, y sentirle, tener cerca su olor, me encanta su manera de hacerme olvidar el mundo de ahí fuera y que no siempre todo sale como queremos, pensar que a su lado nada malo puede pasar, es en esos momentos cuando te sientes agradecido de estar vivo sólo por poder pasar tu vida al lado de una persona como el, mirarle y escucharle incluso cuando no habla, observar lo más perfecto que conociste hasta el momento, temblar incluso en pleno verano cuando sus manos rozan tu cuerpo, mirarle con ganas de comerle a besos, de poder que.darte a su lado para siempre, sólo el sabe donde tengo cosquillas y a que se debe cada una de mis cicatrices y sólo yo le he visto como nadie más lo ha hecho, le he visto llorar, enfadarse y comerme a besos, le he visto sonreír con cada una de sus sonrisas, hasta esa que pone solamente para hacer que yo sonría, pero yo sólo sé una cosa que podría quedarme a su lado para toda la vida, quejándome de sus manías y enamorándome cada día un poquito más de sus defectos , por que es lo que le hacen realmente perfecto.